TITULO ORIGINAL: Tokyo monogatari
AÑO: 1953
DURACIÓN: 139 min.
PAÍS: Japon
DIRECTOR: Yasujiro Ozu
GUIÓN: Yasujiro Ozu & Kôgo Noda
MÚSICA: Takinori Saito
FOTOGRAFÍA: Yushun Atsuta (B&W)
REPARTO:
Chishu Ryu, Chiyeko Higashiyama, Setsuko Hara, So Yamamura, Haruko Sugimura, Kinoko Niyake, Kyoko Kagawa
PRODUCTORA: Shochiku
GÉNERO :Drama
AÑO: 1953
DURACIÓN: 139 min.
PAÍS: Japon
DIRECTOR: Yasujiro Ozu
GUIÓN: Yasujiro Ozu & Kôgo Noda
MÚSICA: Takinori Saito
FOTOGRAFÍA: Yushun Atsuta (B&W)
REPARTO:
Chishu Ryu, Chiyeko Higashiyama, Setsuko Hara, So Yamamura, Haruko Sugimura, Kinoko Niyake, Kyoko Kagawa
PRODUCTORA: Shochiku
GÉNERO :Drama
SINOPSIS:
Una pareja de ancianos campesinos viaja a Tokio para visitar a sus hijos, quienes llevan años viviendo en la capital. Ninguno de ellos tiene tiempo para atender a sus padres, por lo que deciden enviarlos a un balneario. Al regresar del ruidoso lugar, la madre pasa una noche en casa de su nuera, viuda de un hijo fallecido hace algún tiempo. A diferencia de sus cuñados, Noriko muestra afecto por sus suegros y conforta a la anciana. Los acontecimientos se precipitan cuando, en el tren de regreso a casa, la anciana se enferma y su esposo tiene que llevarla a casa de su hijo menor.
COMENTARIO
DE QUE SE TRATA...una pareja de ancianos de Okinichi, una ciudad portuaria cerca de Hiroshima, que emprenden un viaje a Tokio para ver a dos de sus hijos. Uno de ellos es médico y otra tiene un salón de belleza, y sus trabajos y familias no les dejan tiempo para atenderles, por lo que deciden quitárselos de encima llevándolos durante unos días a una especie de balneario.
LO MEJOR... que es tan real, tan cruda, tan simple y dura, que por momentos dan escalofríos. Ante todo tiene un poso de tristeza, pero de tristeza optimista, de aceptación serena de un destino ante el que no se puede escapar. Uno de los grandes méritos de la película es trazar un boceto de las actitudes humanas a través de un sistema sencillo de relaciones familiares. Todo ello con escenas preciosas, como la del matrimonio anciano mirando el mar o la del tren abandonando dolorosamente Okinichi. Una de las obras maestras del gran Yasujiro Ozu. Qué grande es el cine.